viernes, 26 de abril de 2013

San Isidoro. Vosotros sois la luz del mundo


Vosotros sois la luz del mundo. (…) No se enciende una luz para ponerla debajo de un celemín, sino sobre un candelero a fin de que alumbre a todos los de la casa (Mt 13, 14-15).
Jesús, a veces pienso que soy el patito feo de mi familia, de mi clase, de mis amigos. Y empiezo a darle vueltas: que si nadie me aprecia, que si nadie me quiere, que si no se me valora… y termino convenciéndome de que, en el fondo, será por algo... Y encerrado en mí mismo le doy vueltas y revueltas, tantas que acabo mareado y tristón. Hasta que un día, alguien, me hace caso, se fija en mí y de golpe y porrazo me doy cuenta que no soy tan horrible. Jesús, estas cosas que me pasan son manifestaciones de encerrarme en mí mismo, de egoísmo. Jesús, líbrame de mí mismo.
·        Habla tú con Jesús y dile lo que quieras durante dos o tres minutos.
Alumbre así vuestra luz ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre (Mt 13,16).
Jesús, te contaba eso de darme tantas vueltas y de pensar en mi mismo porque comprendo cada vez mejor que los santos han sido capaces de pensar sólo en los demás. Y yo quiero ser santo. Hoy es la fiesta de San Isidoro, un santo que pensaba en cómo ayudar a los demás y fue el primero en inventarse una enciclopedia. Tal vez yo no escriba una enciclopedia pero quiero liberarme de mí mismo y hacer mucho apostolado y llevarte muchas almas.
·        Pídele a Jesús la gracia de pensar más en los demás.
Propósito: iluminar con mi sonrisa.