martes, 16 de abril de 2013

Señor, danos siempre de ese Pan


Pues el pan de Dios es el que ha bajado del Cielo y da la vida al mundo. Ellos le dijeron: Señor, danos siempre de este pan. Jesús les respondió: Yo soy el pan de vida (Jn 6, 33-34).
María, Tú eres la mejor panadera del mundo. Algunas veces acompaño a mi mamá a la panadería y me gusta ver los distintos tipos de pan que hay y los quiero todos. Pero hoy lo tengo claro: El mejor pan es tu Hijo, en la Eucaristía. Pan hecho con trigo de primera: Si el grano de trigo no muere al caer en tierra, queda infecundo; pero si muere, produce mucho fruto (Jn 12, 24). Madre mía, la Eucaristía es fruto del Amor de tu Hijo en la Cruz; es fruto de tu vientre. Como los discípulos yo también pediré: Señor, danos siempre de este pan.
·        La mejor Panadería la encuentro en la Misa. ¿Por qué no voy más veces?
Jesús les respondió: Yo soy el pan de vida; el que viene a mí no tendrá hambre y el que cree en mí no tendrá nunca sed (Jn 6, 35).
Madre mía, lo mío es una adolescencia permanente: Nada me satisface, todo me cansa, me enojo por cualquier cosa Me dicen los amigos que vea esto, haga esto otro, y yo de carreta voy y lo pruebo todo, lo experimento todo y luego… me encuentro en infiernos terrenales. Mi corazón está inquieto, hecho para Dios y solo se satisface con Dios, con el Pan de Vida.
·        Piensa en el Sagrario y dile con el corazón que le quieres.
Propósito: no ser carreta.