No amontonéis
tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre los corroen y donde los
ladrones socavan y los roban (Mt 6, 19).
Ahora que ya ha pasado todo, te cuento Jesús sobre mis amigos. Cuando
en mayo fueron las semifinales de la Champions, los que les van al Real Madrid
se burlaban de los seguidores del Bayern, pero poco les duró porque al día
siguiente lloraron con la Juve. Y lo de llorar no es broma, algunos se
enojaban, otros anduvieron hasta tristes varios días. Jesús, eso me hace pensar
que muchas veces ponemos el corazón en cosas buenas pero que no son tan
importantes. A mi eso de andar de buen humor me cuesta. Dependo mucho de los
demás, de las circunstancias y hasta del clima.
▶¿Qué es lo que me quita la alegría? Cuéntaselo a Jesús.
Porque donde
está tu tesoro allí estará tu corazón (Mt 6,21).
Jesús, y yo ¿dónde tengo puesto el corazón? ¿Cuáles son las cosas
que valoro como tesoros? A mi me gustaría poder llegar a decirte que lo que más
valoro es tener a Ti en mi alma llena de gracia. Jesús, ayúdame a guardarte
como el tesoro más valioso, a no perderte tontamente y a no exponerte a que te
roben de mi alma por medio de engaños (tentaciones).
▶El ángel custodio es un buen jefe de seguridad. Pregúntale como
poder guardar mejor tu alma para que siempre esté en gracia.
Propósito:
Cuidar el tesoro de la gracia.