Cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, para que tu
ayuno lo note, no la gente, sino tu Padre, qué está en lo escondido (Mt 6,17).
Jesús, hoy comienza la Cuaresma.
Nos ha dicho el sacerdote que es un tiempo fuerte, tiempo de conversión…
pero no sé qué quiere decir lo de fuerte. Eso sí, esta mañana he ido para que
me impusieran la ceniza. Los de mi clase, que son un poco mensos, van porque
dicen que todo lo que es gratis se apuntan. Un año más me ha hecho pensar lo
que dice el sacerdote: Recuerda que eres polvo y al polvo volverás… Yo, como el
poeta, repetía por dentro: Polvo, sí, mas polvo enamorado. Algunos
piensan que somos solo eso, polvo, química, física, moléculas, átomos,
neuronas… pero somos capaces de amar, de enamorarnos. ¡Polvo que ama!
u Dile a Jesús cómo piensas vivir esta
Cuaresma: más estudio, ayudar más…
Y tu Padre, que ve en lo escondido, te recompensará (Mt 6,18).
Jesús, en esta Cuaresma
quiero vivir más cerca de ti, ser tu mejor amigo. Jesús, perdón por las veces
que te he hecho enfadar, por las veces que te he olvidado. Y como muestra de mi
amor y arrepentimiento voy a hacer muchos pequeños sacrificios: sonreír
siempre, comer lo que no me gusta, estudiar a tope, pasar la bola, etc.. Y Tú,
que ves en lo escondido… me recompensarás.
u Recuerda que eres de Dios y a Dios
volverás… casi me gusta más.
Propósito: Si aún no lo
he hecho, ir a que me “echen” la ceniza.