lunes, 5 de diciembre de 2011

Novena de la Inmaculada (6º día) Servir-prepararme como María


En aquellos días apareció Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea y diciendo: (…) Preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas (Mt 3, 1-3)
María y José hablan en la casa del “primito” que llevaba unos meses a Jesús y que dentro de poco va a nacer. Tú, María, todavía te acordabas de las palabras que te había dicho Isabel, tu prima: “Bendita tu eres, entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre”; yo te las repito ahora. Y si san Juan Bautista decía a todos que se prepararan para escuchar al Mesías, yo te pido consejo hoy a ti, Madre mía, para prepararme bien para la Navidad. ¿Qué tengo que enderezar en mi vida? ¿Estás contenta de cómo me acuerdo de Dios en estas vacaciones? ¿Tú como te preparabas a 20 días del Nacimiento?
  • Pregunta a la Virgen qué tienes que enderezar.
El que viene después de mí es más poderoso que yo; no soy digno ni de llevar sus sandalias (Mt 3, 11)
Pues, fíjate María que si San Juan no era digno ni de llevar las sandalias ¿para qué seré digno yo? Yo para nada, pero tú sí que eres digna de llevarlo en tu seno, eres la Inmaculada: el Trono de la Sabiduría, el Arca de la Nueva Alianza… en pocas palabras la MADRE DE DIOS. Y como eres también mi Madre, te pido licencia para andar contigo y José estos días y preparar las cosas del Niño que va a nacer. Y tú me dices que las prepare con obras concretas de caridad.
  • Pregúntale a la Virgen qué quiere Dios de ti.
Propósito: Darle a Dios lo que me pida y con buena cara.


Novena a la Inmaculada
con textos de san Josemaría
Textos de san Josemaría, seleccionados en nueve apartados distintos, uno para cada día de la novena. Los apartados acaban con una breve oración compuesta por san Josemaría, dirigida a Nuestra Madre del Cielo.

Esta imagen perteneció
a la madre de san Josemaría.
Familiarmente le llamaban
“la Virgen del Niño Peinadico”.