Y llamó a los doce y comenzó
a enviarlos de dos en dos, dándoles potestad sobre los espíritus inmundos (Mc
6, 7).
Cuando llamas alguien para ser
apóstol, Jesús, lo llamas para que haga mucho bien en nombre tuyo. Lo llamas a
que sea protagonista de la salvación de las almas. Pero oír que llamas da
miedo. Mira, Jesús, que da miedo el comprometerse, el luchar y buscar en todo
cumplir tu voluntad. Jesús, ayúdame a superar el miedo a entregarme y
entregarte lo que me pidas. Que aprenda a ver el bien que puedo hacer si te
digo que sí.
· Sigue hablando sobre
los miedos que te detienen para decirle sí a Jesús.
Y habiendo marchado,
predicaron que hicieran penitencia; y expulsaban muchos demonios, y ungían con
óleo a muchos enfermos y los curaban (Mc 6, 12-13).
Lo que te estaba diciendo, Jesús.
Los apóstoles te han dicho que sí, te siguen y procuran cumplir tu voluntad.
Por eso, van haciendo mucho bien al enseñar a la gente y curando a los
enfermos. Yo de verdad que me quiero comprometer contigo, y aprender hacer tu
voluntad sin estar quejándome o lamentándome. Jesús, auméntame la Fe pero
especialmente la caridad para que por amor a los demás aprenda a decirte que
sí.
· ¿Qué te está pidiendo
Jesús?
Propósito: Decir que
sí.