Tanto amó Dios al mundo que le entregó a su Hijo Unigénito, para
que todo el que cree en Él no perezca sino que tenga vida eterna (Jn 3, 14).
Hoy es una gran fiesta para
decir muchas veces estas frases: Creo en Dios Padre; Creo en Dios Hijo; Creo
en Dios Espíritu Santo; Creo en la Santísima Trinidad; Creo en mi Señor
Jesucristo, Dios y hombre verdadero. Espero en Dios Padre; Espero en Dios Hijo;
Espero en Dios Espíritu Santo; Espero en la Santísima Trinidad; Espero en mi
Señor Jesucristo, Dios y hombre verdadero.
Sigue diciendo las frases anteriores.
Pues Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar el mundo, sino
para que el mundo se salve por Él” (Jn 3,16).
Y ahora dile lo siguiente: Amo
a Dios Padre; Amo a Dios Hijo; Amo a Dios Espíritu Santo; Amo a la Santísima
Trinidad; Amo a mi Señor Jesucristo, Dios y hombre verdadero. Amo a María
santísima, madre de Dios y madre nuestra y amo a mi prójimo como a mí mismo
Sigue por tu cuenta.
Propósito: Amar a la Trinidad.