Cuando venga Aquél, el Espíritu de la verdad, os guiará hacia toda
la verdad (Jn 16, 13).
Multitud de rutas en el cielo
y en el mar. Miles de kilómetros en senderos, caminos y autopistas. Todos
llevan a algún lugar. Algunos… a ninguna parte. Hay caminos que, después de
muchas vueltas, regresan al mismo sitio. También hay calles sin salida. Pienso
en mi vida, en lo que quiero conseguir, mis planes, mis proyectos… ¿Se quedarán
sólo en sueños? Veo a tantos que se han quedado en la cuneta, que han tropezado
y no han sido capaces de levantarse. Y, ¿no me sucederá a mi lo mismo? Jesús,
hoy me enseñas que el Espíritu de la verdad, os guiará hacia
toda la verdad. Me hace falta un guía, alguien que me oriente en la vida.
El espíritu de Verdad habla a través de personas. ¿Tengo director
espiritual?
Todavía tengo que deciros muchas cosas, pero no podéis sobrellevarlas
ahora (Jn 16, 12).
Virgen Santa a Jesús recién
nacido no le dabas filetes. Como buena madre, al principio lo alimentabas con
leche, después papillas, más tarde cereales, fruta, y al final… los filetes.
Cada alimento en su momento. Tengo que deciros muchas cosas, pero no podéis
sobrellevarlas ahora. En la dirección espiritual también todo tiene su
momento.
Jesús, ayúdame a no meter prisa al Espíritu Santo. Todo llegará.
Propósito: tener director espiritual.