jueves, 2 de octubre de 2014

Ángeles Custodios. No me dejes ni de noche ni de día

¿Quién juzgas que es el mayor en el Reino de los Cielos? Entonces, llamando a un niño, lo puso en medio de ellos y dijo: En verdad os digo: si no os convertís y os hacéis como los niños no entraréis en el Reino de los Cielos (Mt 18,1-5).
¡Qué pesados los mayores! Siempre comparándolo todo, midiéndolo todo: ¿cuánto cuesta?, ¿cuánto vale?, ¿cuánto ganas?, ¿quién manda más? ¿Quién juzgas que es el mayor? Jesús, muy buena tu respuesta: Si no os hacéis como los niños no entraréis en el Reino de los Cielos. Jesús, como te decía ayer, delante de Ti quiero ser siempre chico, como el niño que tomaste en brazos, aunque luego mida más metros que Lebron (aquel jugador de basket que mide más de 2 metros). Aprenderé de Ti a llamar Abbá al Padre, papá, papaíto…
Pide a Jesús ser niño delante de Él, aunque te mueras de viejo.
Guardaos de despreciar a uno de estos pequeños, pues os digo que sus Ángeles en los Cielos están viendo siempre el rostro de mi Padre (Mt 18, 10).
¡Felicidades, Ángeles Custodios!, con mención especial al mío (que tan bien me cuidas…). Hoy es fiesta en el Cielo, la Fiesta de los Santos Ángeles, con demostración de acrobacias angélicas y todo. Pero también cumple años la Obra: ¡Felicidades Opus Dei! Gracias, Jesús, por algo tan bueno; gracias Ángeles Custodios porque nos cuidan, muchas gracias San Josemaría por ser un hombre tan fiel.
Di a tu Ángel que te hable de Jesús, de lo guapa que es la Virgen...

Propósito: tratar mucho a mi Ángel.