El Señor
me ha coronado, sobre la columna me ha exaltado.
Cuando
los Apóstoles se repartieron el mundo entonces conocido, al Apóstol Santiago le
tocó en suerte el sitio más lejano, el fin del mundo: Finis Terrae. Pobre
Apóstol, desanimado, lloroso, repetía a orillas del Ebro: —¡Qué brutos son
los hispanos, pero qué brutos…! No hay manera; si lo sé, no vengo. Y en
esto, recibe la visita de la Virgen, que desde lo alto de un pilar, de una
columna —la Virgen del Pilar—, le anima: —Hijo del Trueno, sigue, no te
canses de mis hijos hispanos; que lo que tienen de brutos lo tienen de buenos.
—Venga, vale, seguiré solo un poco más, dijo Santiago el Mayor. Y por eso
estamos aquí tú y yo, muy brutos, pero en el fondo muy buenos, muy chulos.
Dale las gracias al Apóstol y proponte
ser algo menos bruto.
Pero
Él replicó: Bienaventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios y la
guardan (Lc 11, 27-28).
Mañana
domingo, aunque no se celebra, es la fiesta de la Virgen del Pilar. Se ha
organizado un concurso Open de piropos a nuestra Madre. El 1º participante es
el mismísimo Arcángel San Gabriel: Llena eres de Gracia, el Señor es
contigo (Bastante bien). Sta. Isabel: Bendita Tú entre las
mujeres y bendito es el fruto de tu vientre (Muy bien). Pero el ganador
es Jesús: Bienaventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios y
la guardan.
Participa
en el Open, por el 2º premio con tus piropos preferidos.
Propósito: Guapísima, Bombón, Madre mía, Madre de Dios...