En aquel tiempo, Jesús decía: ¿A qué se
parece el reino de Dios? ¿A qué lo compararé? Se parece a un grano de mostaza
que un hombre toma (Lc 13, 18)
Jesús, eso del grano de mostaza me suena a hamburguesa con mostaza,
pepinillo y mucho ketchup. Ya sabes lo mucho que me gustan las
hamburguesas, sobre todo la Whooper con patatas fritas ¡Me vuelven loco!
El reino de Dios (...) Se parece a un grano de mostaza… Jesús yo
me imagino el Cielo como una gran Burger o un Mc Donald’s, pero baratísimo,
rodeado de las personas a las que más quiero: mis padres, mis amigos y sobre
todo, contigo. ¡Qué bien se está contigo! ¡Qué nunca te deje!
Imagínate
como es el Cielo. Quizá prefieras imaginarte una pizzería.
Y añadió: –¿A qué compararé el Reino de
Dios? Se parece a la levadura que una mujer toma y mete en tres medidas de
harina, hasta que todo fermenta (Lc13, 21).
Y en el Cielo, además, me encontraré con tu Madre santísima, la
Virgen Santísima. Como es una gran repostera nos preparará postres exquisitos.
Pedirá la colaboración de los bienaventurados para hacer huesitos de santos,
y a los ángeles para elaborar pasteles de cabello de ángel... Jesús,
¡Qué bien se estará contigo en el Cielo! Jesús, ¡Qué bien se está contigo en la
tierra!
Pide a
Jesús que tu vivir en la tierra sea ya un anticipo de lo que te encontrarás en
el cielo
Propósito: ir al cielo.