“¿Porqué les hablas
por medio de parábolas?” Jesús les respondió: …porque aunque miran no ven, y
aunque oyen no escuchan ni entienden (Mt 13, 10.13).
Un
día, estaba mandando mensajitos cuando mi papá me arrebató el teléfono. “¡Me
vas a poner atención de una vez por todas o no!”, me dijo. La verdad no sabía
de qué me hablaba. Estaba en otro mundo. “Quizá hay que llevarlo a que le vean
los oídos”, dijo mi mamá saliendo en mi defensa. “No está sordo de los oídos
sino de los ojos”, repuso mi papá. Como vio que ni mi mamá ni yo entendimos,
añadió “por tener los ojos en el teléfono es que no oye”. Ahora si ya iba
entendiendo. El asunto es que se parece a lo que les pasaba a muchos cuando
oían a Jesús. Estaban “chateando” en su egoísmo y por eso ni con las parábolas
atendían.
Piénsalo: no gastar más tiempo hablando tonteras por chat.
Dichosos ustedes por
lo que ven sus ojos y por lo que oyen sus oídos; porque les aseguro que muchos
profetas y justos desea-ron ver lo que ustedes ven y no lo vieron, y oír lo que
ustedes oyen y no lo oyeron (Mt 13, 16-17).
Un
día se cayó el WhatsApp. Durante una hora no se podía mandar mensajes. Decía un
tweet muy gracioso: en ese momento descubrí que tenía al lado unas personas muy
simpáticas que decían ser mi familia. ¿No me estaré perdiendo el tesoro de mi
familia por hablar… tonteras?
Y si buscas hablar los mismos temas del chat con los de tu
casa...
Propósito: usar para cosas útiles el cel.